La manzana del pecado.

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Avanzas hacia mi con la manzana del pecado en tus manos, ofreciéndomela sumisa. La cojo y le doy un mordisco sonoro y grande, saboreándola, notando su jugo dulce en mi boca, te miro mientras le doy otro bocado y otro mas..Tu estas de rodillas a mis pies mirándome comerla, sintiendo que cada uno de esos bocados son en tu piel, en tu alma. Ves como te la ofrezco a ti para que la pruebes también y la muerdes con ganas para saborear bien el pecado que reside en ella, un pecado que nos envuelve a los dos rodeándonos de lo prohibido, de lo políticamente incorrecto que esta sucediendo en esas cuatro paredes.

Ahora que los dos hemos comido de la manzana del pecado podemos comenzar con tus pequeños tormentos de placer  mi pequeña sumisa. Te pones a cuatro patas en la cama mirando por la ventana en donde ves los verdes pastos e incluso un pastor en la lejanía con su rebaño. Plasss....el primer azote hace que tu mente vuelva a mi y se olvide del pastor, notas el escozor de mi mano en tu culo, esa mezcla de dolor y placer que hace que empieces a mojarte inconscientemente. Plasssss...segundo azote que resuena en la habitación y tus nalgas tiemblan ante mi empuje. De repente notas mi lengua devorandote entre tus nalgas, lamiendo tu ano, tu sexo mojado, jugando con tu clítoris, gimes de placer y..Plassss tercer azote en tu culo, no te atreves a darte la vuelta y mirarme pero te mueres de ganas por ver mi cara de deseo y lascivia. Notas mi polla dura rozandose contra tu sexo, pajeandote con ella, deseas con todo tu ser que te penetre ya pero ..Plassssss...cuarto azote que cae sobre tus nalgas con mi mano firme, el dolor se mezcla con el placer, incluso empieza a caerse un hilo de saliba por tu boca, babeandote de placer por lo que tu Amo te hace. Te pongo en la boca el resto de la manzana y te ordeno que no la sueltes, que la muerdas fuerte mientras te follo como mi perra obediente. Lo haces sin rechistar y notas el sabor de la fruta en tu boca, a la vez que muerdes mi polla dura y gorda entra hasta el fondo de tu ser, la notas dentro, latiendo, con las venas hinchadas por el deseo, parece que habla dentro de ti diciéndole a tu vagina, eres mía...eres mía..

Plassssss.....quinto azote que te hace morder la manzana con fuerza mientras notas como te tiro del pelo hacia atrás y aumento el ritmo. Al tirarte del pelo levantas la cabeza y miras por la ventana, ves al pastor que sigue alejándose entre los verdes prados preguntándote que pensaría de ti si te viera así, sometida, follada por tu amo y con una manzana en la boca que no te permite ni siquiera poder gemir a  gusto.

Plassssssss.....sexto azote, tus culo esta algo rojo ya y mi polla sigue bombeando cada vez mas fuerte dentro de ti, mis huevos te golpean y escuchas el sonido de estos dándote, eso te pone mas perra aun, tus jugos aumentan y ya son una catarata incontenible, gimes con fuerza y escuchas como tu Amo dice palabras obscenas sobre ti, incitandote a que te corras para el.

Plassssssssssssssssssssssssss...........séptimo azote, ese ha dolido, ha sido fuerte y firme te saco un gemido pero esta vez de dolor, te cabreas, pero a la vez te excita tanto estar así, el placer se mezcla ahora mas con el dolor que antes y hace que la sensaciones sean nuevas  que llegues al siguiente paso, tu Amo separa tus nalgas y empuja mas fuerte la notas tan adentro que no aguantas mas y llega el orgasmo brutal a ti en oleadas, como un tsunami de placer que parece no tener fin,  tus ojos se cierran solo disfrutando del placer no te das cuenta ni del espacio ni del tiempo que estas así. Poco a poco vas recomponiendote y vuelves en ti, te das cuenta que tu Amo se ha corrido contigo porque estas llena de semen que se escurre entre tus muslos.

El se acerca y coje la manzana de tus labios, la has mordido tanto que casi la partes, te besa apasionadamente y le da un mordisco sonriendote. Te dice que hoy has tenido los 7 azotes por los 7 pecados capitales, que es lo que provoca probar la manzada del pecado. Ves como se aleja hacia el baño y te sientes la sumisa mas afortunada del mundo, esperas y confías en que el sepa lo agradecida que estas de tenerlo en tu vida y que el sepa la suerte que tiene de que tu le dieras tu entrega.

Miras por la ventana y el pastor ya no esta, solo quedan los pastos verdes. Eso y tu culo rojo por los siete azotes, por los siete pecados que te ha hecho cometer tu Amo.